Primero que nada, cogimos nuestros abrigos, guantes, gorros y bufandas porque allí iba a hacer muuuuucho frío, y nos subimos en el "coche" rumbo al "AEROPUERTO DE ASTURIAS"
Allí nos esperaba el avión que nos llevaría al mismísimo Polo Norte. Nos fuimos subiendo, nos sentamos y a la señal del comandante, nos abrochamos los cinturones y nos preparamos para despegar...
Tras un viaje muy largo, tomamos tierra en el AEROPUERTO DEL POLO NORTE, y allí vivimos experiencias sorprendentes:
Primero el frío, hacía muchíiisimo frío, casi no podíamos caminar... Nos pusimos "raquetas" en los pies para poder caminar y no resbalar y...¡en marcha!
Después de pasar el peligro...nos acecha una ventisca...casi no podemos ni ver ni caminar y tenemos que taparnos los ojos y subirnos la bufanda para arriba...¡ufff!!
Luego, se va acercando la noche, así que decidimos construir un iglú para poder cobijarnos y dormir en él...Y allí pasamos la noche, bien juntitos para darnos calor...
A la mañana siguiente, tenemos mucha hambre, así que decidimos pescar algo: lo primero era hacer un agujero en el hielo, luego coger un palo para hacer de caña e intentar coger algún pez, para luego comérnoslo...jijijiji.
Mientras pescamos, aparece un LOBO ÁRTICO, y de nuevo nos ponemos a salvo en el iglú.
También viajamos en trineo tirado por HUSKYS SIBERIANOS... y claro, no pudimos evitar "transformarnos" en estos perros tan especiales...Así que todos a ladrar, corretear, juguetear, acariciarse etc...
¡Lo pasamos genial!
Y para terminar, cogemos el avión de vuelta a casa, pilotado por Gloria.
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